martes, 12 de agosto de 2008

Invencible.

Hace rato que escribir etiquetando "Espersonal"... se me hizo costumbre. Guardados en el baúl del recuerdo ( y de mi memoria) quedaron mis ensayos. Yo creo porque es más fácil de esta forma, como más fluida y menos rígida. Al mismo tiempo, recalca mi ímpetu de desvelo y el lado más viesceral que tanto me caracteriza. Como ahora, que me dieron ganas de agradecer.
Agradecerle a todos aquell@s que no creyeron ni creerán nunca en mí. Gracias, de verdad, por creerme tan inútil de presencia y anhelos, por sobrepasar mi autoestima y recalcar en mi cara que nado en contra de la corriente. Gracias, estimad@, por aquellos detalles que hacen de mi vida una desilusión cada vez más común y corriente. Gracias pro tu individualismo, también; por nos er capaz de ponerte en el lugar del otro, a mí nunca me enseñaron a ser así, y mira de la buena manera que me lo estás enseñando (...) Gracias por esa gran sonrisa que me muestras y apenas me doy vuelta te desarmas en ironía, soberbia y -por qué no- envidia. En resumidas cuentas, gracias por demostrarse tu hipocresía en flor.
No sabría cómo agradecerte todo esto que has hecho por mí, darling. Pero no te molestes en darme un de nada de vuelta, para qué...no te malgastes. Mira, algún día repararé el favor concebido y serás el primero en enterarte. Eso si, yo no creo que pueda hacer tanto por ti, no me da la fuerza. Es que como soy tan débil e idiota, que no se me ocurre cómo. Pensé que así estaba bien, siendo yo. Dile a tus amigos que eso también va para ellos ¿Ya?.